Siempre se ha dicho que los ojos son el espejo del alma y son algo mas son el punto donde nuestro cerebro se fija más cuando hablamos con alguien. Por eso cuando una paciente me comenta: «quiero quitarme los surcos de alrededor de la boca que me hacen mayor», siempre les comento que la zona que de verdad marca nuestra edad es la mirada.
Los primeros signos de esa edad aparecen justo ahí en la zona inferior del ojo donde se funde con la mejilla. Aquí se produce una disminución de la grasa encima del hueso de la órbita. Y a medida que la grasa desaparece el ojo queda mas enmarcado por el hueso.
Claro que no es el único cambio… estas las arruguitas del contorno, que ya hacen su aparición, y también la caida de la cara que va formando tanto los surcos entre la boca y las mejillas como la pérdida del óvalo facial.
¿Cúal es mi primera recomendación para el contorno del ojo?
Es muy simple:
¡hay que dar el volumen pérdido!
¡hay que eliminar las arruguitas!
Para lo primero, tenemos en el mercado implantes de relleno voluminizadores como el ácido hialurónico denso o la hidroxiapatita cálcica. Productos que han demostrado eficacia y lo mas importante seguridad. Ya sabemos que no duran para siempre pero es que nuestra cara no se mantiene igual ahora que dentro de 10 años y lo que nos ayuda en este momento puede colocarse en un mal lugar y dar volumen donde menos está indicado.
Pero hoy en día avanza de forma importante el relleno de grasa. Es natural, dura mas en el tiempo y evoluciona acorde con nuestra cara… si adelgazamos adelgaza con nosotros, sufre los cambios del tiempo igual que otros tejidos. Y tiene células madre que son capaces de mejorar la calidad de la piel de una forma notable de modo que mejora el aspecto de esas arruguitas. La técnica de tranferencia de grasa a esta zona es meticulosa y precisa de instrumental quirúrgico muy fino y específico.
Para las arruguitas podemos aplicar rellenos de hialurónico de baja densidad que aportan volumen mínimo a la dermis y también podemos emplear peeling de profundidad media o láser fraccionado. Con el peeling hay que tener sumo cuidado, porque alargar el tiempo de exposición puede provocar alguna lesión química local. Imaginamos la piel del párpado fina, sin tejido celular subcutáneo casi y adherida al músculo.
En mi opinión esta zona se beneficia mucho del láser fraccionado a baja intensidad. Se deposita el calor necesario, repartido uniforme y sobre todo muy controlado. El postláser es escaso de 3-4 dias máximo de duración y con resultados muy visibles desde el principio. Además permite tratar las arruguitas del párpado mas móvil cosa que no es posible ni con el relleno, ni con los peeling químicos.
Poe supuesto en cada paciente hay que valorar el tipo de piel, grado de envejecimiento, grosor de la piel y recomendar un tratamiento específico que muchas veces es la combinación de varias técnicas según la zona de la cara.
Dra. Jiménez. Cirujano Plástico, Estético y Reparador. Consulta. Dr. Fleming 24, 1ºA, 28036 Madrid

La Doctora Elena Jiménez García es especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora y está inscrita en el Ilustre Colegio Oficial de Médicos (ICOMEM), en la Sociedad Española de Cirugía Plástica reparadora y Estética (SECPRE), en la Asociación de Cirugía Estética Plástica (AECEP), de la ISAPS, y de la Sociedad Europea de Rinoplastia (RSE)) -una de las más prestigiosas del mundo-, por lo que está reconocida actualmente como una de las mejores cirujanas plásticas de Madrid.